Parece que las vacaciones, o la falta de ellas, afectaron el ánimo de los concejales lanusenses porque, en la última sesión extraordinaria del jueves 3 de Febrero de 2011, todo fue un compendio de agresiones y devoluciones de agravios. Si hubiese que encontrar una responsable del clima enrarecido, no cabe ninguna duda que los méritos se los lleva la concejal del GEN, Dra. María La Rosa. Y es que ha tomado tan personalmente su responsabilidad como representante de los vecinos que no mide las consecuencias a la hora de argumentar su posición y embiste contra el oficialismo tratando a sus funcionarios de mentirosos y dejando un manto de sospecha, dejando un manto de sospecha en cada proyecto presentado desde esa bancada. En la sesión presente no había demasiados puntos oscuros para tratar salvo los detalles de mala argumentación o falta de información que, a esta altura, ya se ha convertido en moneda corriente en los expedientes enviados desde la oficina del Director General Dr. Crespo Armengol, que suele ser el blanco de las críticas de la oposición. En esta ocasión se trataban los convenios sobre trabajos en la Cuenca , y la crítica, precisamente, tenía que ver con la falta de detalles. Omar López y Amore, coincidieron al objetar que figurara la mención de declarar zona de emergencia a la Cuenca (que se extiende al 70% del partido) en lugar de aclarar que solo se trataba de la zona ribereña, cuestión que aclaraba en otra parte del expediente. Posteriormente se trataron los temas de inundaciones, arreglo de la calle Ituzaingo y el problema de los cortes reiterados de luz. Allí, a pesar de ser aplaudida por los vecinos presentes, la concejal La Rosa , tuvo conceptos muy duros y una reiterada posición de agresividad, al punto de afirmar que no hacían falta más funcionario y, en cambio, había que echar a muchos de ellos por ineficientes. La cuestión provocó la reacción del concejal Montero (foto consultando con ediles de UCyB), entre quienes se entabló una discusión donde Montero se declaró “cansado” de los dardos de la concejal del GEN. La cuestión es que todo se aprobó y, finalizada la sesión, el circo siguió en el recinto con una discusión entre La Rosa y la concejal oficialista Graciela Lizarraga, por comentarios hacia La Rosa que esta escuchó. Siguió fuera del recinto ante la mirada atónita de los vecinos que, autorizados por el presidente del HCD, José Luis Pallares, intervinieron al final, aclarando que Montero no los atendió telefónicamente. Montero explicó que no se encontraba en Lanús, pero ante los ánimos caldeados, la explicación cayó en saco roto.
Hasta “Chirola” se enojó
En el salón de los pasos perdidos, otra discusión se generaba. Esta vez entre el concejal Cristian Bosio y Roberto “Chirola” Díaz. Alcanzamos a escuchar a Díaz, muy alterado, invitar a Bosio a encontrarse en otro lugar al tiempo que decía, “Disfrutá del tiempo que te queda” , además de tildarlo de “Drogadicto”. Bosio aclaró que hará una presentación judicial por lo que consideró una amenaza de muerte. La cuestión, según la información obtenida, tuvo que ver con la decisión de Bosio de darle de baja a la esposa de Díaz, quien cobraba sin trabajar en ese espacio político y, además, criticaba e insultaba a los componentes del espacio dado que Díaz está parado en otro segmento del Denarvaísmo. “Chirola” le reclamó, “Por que no la echaste antes?”, a lo que Bosio respondió que ya estaba firmada la disposición y le dio de baja en el nuevo ejercicio. Como se ve, de todo y para todos. Lástima que se haya ensuciado un acto que debería ser ejemplar. Lo curioso es que lleven alumnos para enseñarles como se maneja un HCD.
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