Finalmente, la empresa de telefonía celular, decidió cortar por lo sano y desmantelar la antena de Pirovano y Margarita Wield, que fuera incendiada por un grupo de vecinos alterados por las constantes enfermedades peligrosas que sufrían sus familiares. El incidente provocó, en su momento, escenas de gresca entre los mismos vecinos por la imprudencia en el accionar dado que el fuego, en un momento y por acción del viento, se propagó a una casa lindera donde dormían niños. Los operarios encargados de desmantelar la torre, nos confiaban que el trabajo realizado por una empresa contratada, tenía un costo de ciento cincuenta mil pesos, cuando su instalación sale alrededor de doscientos mil pesos. Esperemos que el ejemplo no cunda y otros imprudentes crean que esta es la solución al problema. La municipalidad, mientras tanto, hace silencio de radio y no emite opinión. Quizás, llegado el caso de otro incidente, el intendente mande a su secretario a decir que eso no les compete. Mientras tanto, la empresa afectada, debe estar aleccionando a sus abogados para hacerle un juicio a la municipalidad que pagaremos todos.
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