04 octubre 2010

“Los proyectos chocan contra la ciudad que tenemos”

La charla con el concejal Omar López, prosiguió por caminos políticos. Sus constantes denuncias sobre varias irregularidades, van más allá del ámbito del medio ambiente y tienen que ver con el estado de las cuentas municipales, la seguridad y la falta de obra pública, opacan el fervor de López para hacerse cargo de su postulación a intendente. En ese sentido, creímos necesario que defina sus proyectos para que la ciudadanía los conozca. En ese sentido dijo que, “Los proyectos chocan contra la ciudad que tenemos”. Afirma que, “Mañana, en la sesión, vamos a pedir que saquemos a la política de la gestión. No quiero que un grupo de concejales salgan victoriosos sobre otro grupo. Creo que los 24 concejales debemos aprobar un proyecto para que los actos de gobierno tengan transparencia, que redunda en la mejor calidad en la política que le queremos brindar al ciudadano”, y asegura, como propuesta que, “No vamos a hacer nada de lo que está haciendo el gobierno actual”, es decir, “Gobernar de espaldas a la gente”, y añade, “¿La educación es hacer festivales en las plazas, nada más?”, y analiza, “Es estado tiene que estar junto al joven cuando faltan sus padres porque tienen que trabajar, tiene que ser el nexo con la escuela”, para ello, menciona su experiencia de muchos años en gestión, junto a personas de capacidad y experiencia, “Nosotros nos rodeamos de gente honesta y capaz, en ese orden”, asegura. Le preguntamos si ese nosotros incluye un potencial que se puede enfrentar a la maquinaria oficialista, y nos responde con otra pregunta, “¿Qué maquinaria? ¿La que no puede salir a la calle a decir cuatro palabras en una esquina. Esa es la maquinaria, o salir de noche a pegar banderas argentinas? Parece que le estamos haciendo tributo a Cordera, Argentina al palo”. Se entusiasma, y se atreve a pronunciar la palabra “Fascistas”, cuando se refiere a la actitud de algunos que criticaban la amenaza y hoy la sostiene al amedrentar a otros que no comparten su idea política, en línea con el gobierno para quien, los que no comulgan, son enemigos (esto corre por cuenta del cronista).

“Se quieren salvar agarrándose del ancla”

Recordamos, con López, el mensaje subliminal que terminó dominando la inauguración del local partidario de Pallares donde, hasta el mismo Darío, terminó halagando la figura de Quindimil. López, sarcástico, definió que, “Algunos, para salvarse, terminan aferrándose al ancla”. El sentido tiene que ver con una salvación circunstancial porque cuando fondea el ancla se terminan ahogando, “Vos no podés tener un discurso para cada esquina”, afirma, “Lo que pensás hoy, lo pensás siempre. Te pueden hacer cambiar de actitud con los hechos. Siempre pensé que el intendente iba a concretar una gestión aceptable, y mejorada con al correr de los años. Nunca pensé que iba a hacer una gestión tan deficiente y con tan poco conocimiento de las políticas públicas que se deben llevar a cabo”, y admite, “Yo levanté la mano cuando pidieron el aumento de las tasas, porque lo habían mencionado en su campaña y me pareció coherente, pero ahora lo quieren formular como solución sistemática. No le cuestionamos el logo que cambió al escudo municipal, pero dijimos que era un logo, por eso, cuando ellos plantean que ponemos palos en la rueda, nosotros jamás lo hicimos”, y define, “Hay muchas cosas para revisar, pero se revisa de la cabeza para abajo”. En la cuestión, puramente política, López afirma que, “Nosotros nos planteamos al revés, el armado. Hay compañeros que arman de arriba, hacia abajo, es decir, eligen un compañero a determinado cargo, y se besan, se abrazan, andan por todos lados repartiendo fotos abrazados con el, y hay otros, como nosotros, que pensamos que hay que proyectar una ciudad y, para eso, necesitamos de los mejores compañeros peronista, sin puntos que nos dividan. No nos podemos poner a pensar en Das Neves, Rodríguez Saá o Reutemann, porque estamos en otra esfera, podemos discutir el modelo de ciudad que queremos. Una vez que lo acordemos, seguramente, vamos a acordar los distintos espacios donde vamos a recalar. No conversamos con aquellos que han mutado tanto que hoy, realmente, no los conocemos”, concluye.



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