Como sucedió cuando detuvieron al sindicalista Gerónimo “Momo” Venegas, ahora el Sindicato de Trabajadores Municipales de Lanús, sale a respaldar al dirigente camionero y titular de la CGT y el Peronismo, anticipando que, “Queremos hacer pública nuestra más profunda solidaridad militante con el Secretario General de la CGT, Compañero Hugo Moyano, ante los hechos que son de público conocimiento y que repudiamos enérgicamente”, y aventuran, “No dejan de ser maniobras espurias que lo único que pretenden es frenar este proceso participativo y de recuperación que comenzó a transitar la clase trabajadora del país y que tanto molesta a los poderosos y las corporaciones, y del cual no estamos dispuestos a retroceder ni un milímetro”, poniéndose, “A la entera disposición de los compañeros camioneros a quienes también hacemos extensiva nuestra solidaridad y por lo que reuniremos nuestros cuerpos orgánicos a fin de determinar los pasos a seguir con referencia a las medidas que han decidido llevar adelante”. Dicen que creen, “Profundamente en la justicia y seguramente nada prosperará, pero no somos ingenuos, sabemos que detrás de todo esto se encuentran intenciones inconfesables de confundir y debilitar a los trabajadores. Nosotros respondemos como es nuestra costumbre, con Unidad y Solidaridad, como corresponde a dirigentes bien nacidos”. Que conste que no lo dicen por el juez sobre el que, casualmente, cayó la causa y que no es otro que Oyarbide. Curiosamente, algunos miembros del gobierno (del mismo signo político que el STML), quieren saber que saben los suizos de las actividades de Moyano, a quien asocian con la empresa Covelia y con Depresbiteris que de Chingolo pasó a Puerto Madero, sin escalas. Moyano, con sutileza, exclamó: “¡Que carajo tengo que ver con Covelia!, a pesar de haber operado para instalar esta empresa en el territorio, según deslizaron algunos intendentes.
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