Después de hacer colas interminables, padecer preguntas rayanas en lo indigno, es decir, demostrar que uno es un fracasado de la vida y debe rogar por un subsidio, los muchachos, entrenados para esta especie de tortura sicológica, determinarán su usted está en condiciones infrahumanas para recibir una pensión miserable que no lo sacará de la indigencia, pero lo convertirá en un esclavo modelo 2011. Seguramente, deberá subir a un micro y alentar la candidatura de un personaje que, a partir del triunfo, se olvidará de usted y sus necesidades, necesidades que el mismo gobierno provocó por mala praxis. Lo que sigue es la parodia de ayuda social que le darán funcionarios que ganarán diez veces más que los pensionados: “Los vecinos lanusenses que se inscribieron en la sede local de la Comisión Nacional de Pensiones del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación para percibir el beneficio se encuentran en la tercera etapa de la tramitación. En esta oportunidad, trabajadores sociales de la institución mencionada citaron a cien futuros beneficiarios para realizar el informe que luego determinará si la persona puede recibir el dinero, siempre teniendo en cuenta los requisitos exigidos. Cabe destacar que la pensión está dirigida a aquella parte de la población que se encuentra en estado de vulnerabilidad social, sin amparo provisional o no contributivo, no posean bienes, ingresos ni recursos que permitan su subsistencia y que no tienen parientes obligados legalmente a proporcionarle alimentos o que, teniéndolos se encuentren impedidos para poder hacerlo, -Las pensiones por invalidez representan el 70% de una jubilación mínima y, una vez completada esta parte de la suscripción, el beneficiario deberá esperar aproximadamente cinco meses para recibir los resultados-, expresó la responsable del Centro de Atención Local de la Comisión Nacional de Pensiones, Adriana Alsamora”.
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