Las tasas desbaratan la calma

Ayer nomás decíamos que, tanto el presupuesto como el aumento de tasas, sería aprobado en el HCD local. Lo de las tasas, por ser más conflictivo, como todo incremento, tuvo mayor resistencia y, obviamente, provocó mayor conflicto. El PRO, encaramado en una campaña por instalar una verdad distinta, votó en contra, a pesar que el gobierno de Macri aumenta hasta provocar caos, paros y revueltas, por aquello de “Haz lo que yo digo,,,”. En esa línea, Grindetti descalifica al intendente Díaz Pérez, olvidando que, a pesar de manejar un presupuesto de más de cuarenta mil millones de pesos, no logra articular una política pública sin generar roces con la gente y con el gobierno. La “Juan Domingo”, de Deibe y Torlaschi, con un argumento Sciolista, a pesar de provenir, uno de Lavagna y del PRO y el otro del FpV, aseguran que Darío es “Un pasante rentado”, que aumenta porque no sabe gestionar y se sostiene “con el bolsillo de los contribuyentes”. Baratta, desde el massismo, dice que Massa pide que no sean destituyentes, aunque asegura que, de las tasas no dijo nada. Enojado como estaba, por lo de las tasas y lo de Graña con denuncia del ex comisario D’amico incluida, es entendible que ni acompañe, ni admita el bajo incremento, que llega a dos pesos en la mayoría de los casos, y marche al Centro de Monitoreo para exigir respuestas sobre funcionamiento e inversiones, prometiendo que, si demuestra que el ejecutivo tuvo que ver con la edición del programa, como él afirma, “No voy a tener clemencia”, asegurando que ya existe una presentación judicial contra D’amico y el municipio por lo que considera una difamación para con “un oficial con más de 30 años de trayectoria policial intachable”, que, según su criterio, siempre respetó los códigos. Quedan los ediles del FAP y aquí cabe destacar que fueron de los pocos en acercarse a debatir con el secretario de hacienda, Silvio Franqueira, cuando este se movilizó al HCD, a dar cifras y explicar la confección del presupuesto. Otro fue el Dr. Carlos Folino, quien no acompañó la aprobación, según la información recibida. La Rosa, Stella García y Oscar López, sostienen una impronta crítica sobre el manejo municipal, al que consideran ineficaz para invertir los fondos recaudados. De esta manera, los nueve votos no pudieron impedir el aumento y habrá que ver como se desempeñan al momento de votar el presupuesto que, damos por sentado, será aprobado con mayor número. Queda por analizar el comportamiento del edil Salvador Baratta. Ya explicamos su enojo, lo que no es óbice para disculpar su accionar, agrediendo de palabra y con veladas amenazas a los concejales Héctor Montero y a Gabriel Di Masi, delante de testigos. Los que lo conocemos, sabemos del temperamento del “Tano”, sobre todo en una circunstancia donde se ve afectado su nombre y honor en un exhibición pública a la que tuvieron acceso su hija y sus amigos y, obviamente, su familia. La ley dilucidará la verdad, mientras tanto, es necesario que la cabeza someta al temperamento para no afectar su buen juicio como político.

La otra cara es la de Di Masi, Bosio, Regueira que, como anticipó el intendente, apoyarían la medida porque “Massa es Kirchnerista” y, en esa línea, no afectaría la gestión de un intendente del mismo signo político. Lo mismo sirve para Carlos Barbagallo, y para Piccolo que, como dirigente sindical de los trabajadores municipales, no iba a votar en contra de los intereses de los afiliados.