La sesión
ordinaria del viernes 21 de Setiembre no parecía importante para algunos ediles
que llegaron cuando la sesión debería haber finalizado, sin embargo lo que se
trataba era importante. Por lo menos para los familiares de los vecinos
asesinados en los últimos tiempos a causa de la inseguridad que, para el
oficialismo sigue siendo una “sensación” y para los vecinos es la sensación de
ineficacia policial y política, pero cruda realidad de sangre y temor. Lo que
se aprobó y lo que se necesita son, para los que caminamos el distrito, cosas
totalmente diferentes. Insistir con el armado de Foros que siempre respondieron
al oficialismo y nunca sirvieron para otra cosa que darle poder a un ciudadano
para negociar un lugar de privilegio, o saber cuales son las empresas de
seguridad que trabajan en el distrito, son pérdidas de tiempo y de dinero
municipal. Basta con caminar, basta con interesarse en serio. El tema de
gendarmería, si los concejales se ocuparan de averiguar, está siendo organizado
desde el municipio para establecer bases en distintos puntos del distrito. No
puedo adelantar cuales, pero los que saben, lo tienen claro. Lo mismo que con
los corredores escolares y los vecinos alertas. Quizás se olvidan que fue el PRO
el que vino a instalar sirenas en las cuadras para alertar cuando hay alguien
en actitud sospechosa. Si hay tanta preocupación, ¿Por qué no se imitan los
buenos ejemplos. Por qué son ajenos?.
La presidente se toca
En
definitiva, la oposición terminó repudiando una publicación de la revista
noticias sobre el goce de la presidente, pero nada dijo de quien creó el video,
es decir, sigamos persiguiendo a Clarín, La Nación y todo aquel que piensa
distinto, y aclaro que todo el tema me pareció desagradable porque, en
definitiva, se ofende a una mujer, a una presidente y a una institución, pero
el repudio debe ser completo o no ser, sino se cae en una persecución
Macarthista. En el mismo rumbo se desliza este “beneplácito por el arribo de
fuerzas”, aunque nadie objeta por que razón llegan después de 12 muertos y no
cuando aparecieron los primeros síntomas, y dejo afuera del reclamo al
intendente que, esta vez, se que los pidió reiteradamente, sin resultado. Si,
realmente, están preocupados por la inseguridad, con estas medidas no lo van a
solucionar, hace falta más rigor en el reclamo y, por supuesto, mayor
intervención, aún más allá de lo que la investidura permite, porque lo que está
en juego no es una banca, es la vida de aquellos que votaron para que ellos ocupen
esas bancas. La vida de sus familias, inclusive, porque la delincuencia no hace
diferenciaciones a la hora de actuar bajo los efectos de fármacos y drogas
prohibidas. En esa misma línea, funcionan las marchas que, sin intervención
política, son saludables como expresión del pueblo, pero ineficaces si no se
institucionalizan, es decir, si no nace del reclamo un orden y una propuesta.
Pedir que los intendentes acudan a instancias superiores, es desconocer el
circuito político, porque ningún intendente dejará timbre sin apretar para
conseguir auxilio en la emergencia. Lo que es necesario es la persistencia y
las ideas claras respecto de lo que se puede y debe pedir y el lugar adecuado
donde hacerlo. ¿De que sirve reclamarle al intendente si ya aclaró, hasta el
hartazgo, que no es un tema suyo, y el gobernador solo viene cuando hay que
posar para la foto? Reclamemos a los que tienen la potestad de cambiar algo, a
los legisladores, a los jueces, a los ministros. Sentar a Mariano Amore en el
HCD, no sirve para nada que no sea una chicana política porque el hombre tiene
las respuestas acotadas por orden de arriba y por propio desconocimiento de un
tema que nadie domina, aunque muchos se jacten de ello. Si hubiese alguien que
conociera las claves, el delito ya no existiría o él sería el cómplice. Quien
no entienda esto debe dejar de ofender a los que trabajan y dan su vida por
ellos, los policías, verdaderas víctimas que pagan con su vida cuando son
descubiertos y se ven impedidos de actuar con más severidad por este tema de
los DDHH para los delincuentes. La idea no es polemizar sino tratar de
entender, entre todos, que solo la unidad de criterios nos ayudará en una lucha
donde los delincuentes piensan, durante las 24 horas como jodernos y nosotros
le dedicamos un par de horas después del trabajo. Dicen que el pueblo unido,
jamás será vencido. No hay que comprar todo lo que dicen los políticos, sobre
todo después de un gobierno peronista como el de Menem, pero la base sirve para
comprender que juntos podemos.
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