Marzio, el esforzado

La memoria, en general, nos sirve para defendernos del engaño y los artificios políticos. Sobre todo en este ítem donde nadie dice toda la verdad y, generalmente, se miente para preservar la identidad y los bien ganados espacios de poder. En este caso del “Pan Social”, recuerdo que solía quejarme con Marzio por tener, “El pan más caro del país”, en aquella época lo pagábamos siete pesos y en Villa Jardín, su opositor, (Creo que se llama Ritson) que presentó “El pan de la salud” sin éxito, lo vendía a la mitad de precio, cuestión que provocó serios enfrentamientos de los que Marzio no salió bien parado, a pesar de su amistad con Quindimil que le aprobaba todo a cambio de la “ayuda” económica del panadero y “Los Amigos de Lanús” que invertían en construir la Departamental de Lanús. El caso es que hoy, el presidente histórico del Centro de Panaderos, Alberto Marzio, puede decir, “Con este esfuerzo traeremos un alivio a la economía diaria de nuestros vecinos”, al promover la venta de un pan a nueve pesos el kilo, “Sabemos que con este esfuerzo traeremos un alivio a la economía diaria de nuestros vecinos, y nos alegra poder responder de esta manera a la preocupación permanente de nuestro intendente Darío Díaz Pérez. Por eso queremos agradecer a nuestros asociados por adherirse a esta campaña”, manifestó Marzio.
Por su parte, el intendente Darío Díaz Pérez expresó: “Lo importante es que los vecinos sepan que compran mercadería de primera calidad. El precio de 9 pesos el kilo del Pan Social es el producto de la conciencia y la buena voluntad de los panaderos. Quiero darle las gracias por este esfuerzo que los enaltece y por haber sabido interpretar la necesidad imperiosa de poner al alcance de todos, este preciado producto que no debe faltar en la mesa de ningún vecino de Lanús”.
El Pan Social se podrá adquirir en más de 125 panaderías de todos los barrios del distrito a partir de hoy a nueve pesos el kilo. Es un producto de similar calidad a las demás variantes, pero en piezas más grandes, hasta cinco por kilo. Las panaderías que se adhieren a esta iniciativa lucirán en sus vidrieras el afiche que anuncia la disposición del producto y el precio acordado.

La medida parece buena, pero habría que conocer las negociaciones para entender el verdadero alcance del “esfuerzo”. Sobre todo en lo referido al pan que se entrega en los comedores y que el municipio paga a diez pesos el kilo, ¿Bajará ese también?